Cuando se
mezclan excelentes ingredientes el resultado no puede ser otro que
una obra de arte
Hace ya dos
años que nos dejó el Maestro de Flamenco Enrique Morente, entre
toda su extensa obra hay un disco en colaboración con algunos de los
mejores artistas de flamenco. Ese sería uno de los ingredientes
unidos a su portentosa voz, los otros son nada menos que poesías del
inigualable poeta también granadino García Lorca, símbolo para los
andaluces y patrimonio de la humanidad.
Y otro de
los ingredientes para rematar la obra es la sorprendente aportación
de la banda de rock granadina Lagartija Nick.
Colaboró
desde el principio con Morente otro reconocido y prestigioso talento
Leonard Cohen.
Enrique
Morente Cotelo (Granada, 25 de
diciembre de 1942 – Madrid, 13 de
diciembre de 2010) fue un cantaor andaluz,
considerado como uno de los grandes renovadores del flamenco.
N.º | Título | Letras | Música | Duración |
1. | «Omega» | Federico García Lorca | Enrique Morente, Lagartija Nick | 10:48 |
2. | «Pequeño vals vienés (Take This Waltz)» | Federico García Lorca | Leonard Cohen | 5:33 |
3. | «Solo del pastor bobo» | Federico García Lorca | Juan Antonio Salazar | 3:42 |
4. | «Manhattan (First we take Manhattan)» | Leonard Cohen (adapt. Enrique Morente y Alberto Manzano) | Leonard Cohen | 4:44 |
5. | «La Aurora de Nueva York» | Federico García Lorca | Vicente Amigo | 4:59 |
6. | «Sacerdotes (Priests)» | Leonard Cohen (adapt. Enrique Morente y Alberto Manzano) | Leonard Cohen | 4:07 |
7. | «Niña ahogada en el pozo» | Federico García Lorca | Enrique Morente, Cañizares y Lagartija Nick | 4:45 |
8. | «Adán» | Federico García Lorca | Isidro Muñoz | 4:14 |
9. | «Vuelta de paseo» | Federico García Lorca | Enrique Morente y Lagartija Nick | 5:08 |
10. | «Vals en las ramas» | Federico García Lorca | Isidro Muñoz | 4:01 |
11. | «Aleluya (Hallelujah n. 2)» | Leonard Cohen (adapt. Enrique Morente y Alberto Manzano) | Leonard Cohen | 6:24 |
12. | «Norma y paraíso de los negros» | Federico García Lorca | Isidro Muñoz | 4:34 |
13. | «Ciudad sin sueño» | Federico García Lorca | Enrique Morente y Lagartija Nick | 5:46 |
Federico García Lorca (
Nació en
Fuente Vaqueros, provincia de Granada el 5 de junio de 1898
y murió fusilado entre Víznar y Alfacar, ibídem
el 19 de agosto de 1936
Fue
un poeta, dramaturgo y prosista andaluz, también
conocido por su destreza en muchas otras artes. Adscrito a la
llamada Generación del 27, es el poeta de mayor influencia y
popularidad de laliteratura española del siglo XX.
Como
dramaturgo, se le considera una de las cimas del teatro
español del siglo XX, junto con Valle-Inclán y Buero
Vallejo.
Murió
ejecutado tras la sublevación militar, golpe de estado de 1936 por
su afinidad con el Frente Popular y por ser
abiertamente homosexual.
Pero
Federico Gracia Lorca tendrá un articulo especial en este blog.
Omega
Como
la noche es interminable
cuando se apoya en los enfermos.
Y hay barcos que buscan ser mirados
para poder hundirse tranquilos,
para poder hundirse tranquilos,
para poder hundirse tranquilos.
Si cada aldea tuviera una sirena
mi corazón tendría la forma de un zapato
No solloces, silencio,
que no nos sientan, que no nos sientan.
Tengo un guante de mercurio
y otro de seda, y otro de seda.
Se cayeron las estatuas
al abrirse la gran puerta.
Yo me cortaré la mano, me cortaré la mano derecha.
Tengo un guante de mercurio,
de mercurio y otro de seda.
Se cayeron las estatuas
al abrirse la gran puerta,
al abrirse la gran puerta.
Aqueos los golpes,
aqueos por Dios,
que se le arrancan las alas,
que se le arrancan las alas,
de fatiga, las alas,
las alas a mi corazón.
Como doblaron las campanas ...
No solloces, silencio,
que no nos sientan, que no nos sientan.
Tengo un guante de mercurio
y otro de seda, y otro de seda.
Se cayeron las estatuas
al abrirse la gran puerta.
¡Las hierbas!
¡Las hierbas!
Tú vienes vendiendo flores,
tú vienes vendiendo flores,
las tuyas son amarillas,
las mías de tos colores.
Tú vienes vendiendo flores,
tú vienes vendiendo flores,
las tuyas son amarillas,
las mías de tos colores.
No solloces, silencio,
silencio que no nos sientan.
Se cayeron las estatuas
al abrirse la gran puerta.
No solloces, silencio,
silencio que no nos sientan.
Se cayeron las estatuas
al abrirse la gran puerta.
No solloces, silencio,
silencio que no nos sientan.
Se cayeron las estatuas
al abrirse la gran puerta.
'Omega', de Enrique Morente y Lagartija Nick.
El disco más rupturista del cantaor, publicado en 1996 y reeditado en 2008.
cuando se apoya en los enfermos.
Y hay barcos que buscan ser mirados
para poder hundirse tranquilos,
para poder hundirse tranquilos,
para poder hundirse tranquilos.
Si cada aldea tuviera una sirena
mi corazón tendría la forma de un zapato
No solloces, silencio,
que no nos sientan, que no nos sientan.
Tengo un guante de mercurio
y otro de seda, y otro de seda.
Se cayeron las estatuas
al abrirse la gran puerta.
Yo me cortaré la mano, me cortaré la mano derecha.
Tengo un guante de mercurio,
de mercurio y otro de seda.
Se cayeron las estatuas
al abrirse la gran puerta,
al abrirse la gran puerta.
Aqueos los golpes,
aqueos por Dios,
que se le arrancan las alas,
que se le arrancan las alas,
de fatiga, las alas,
las alas a mi corazón.
Como doblaron las campanas ...
No solloces, silencio,
que no nos sientan, que no nos sientan.
Tengo un guante de mercurio
y otro de seda, y otro de seda.
Se cayeron las estatuas
al abrirse la gran puerta.
¡Las hierbas!
¡Las hierbas!
Tú vienes vendiendo flores,
tú vienes vendiendo flores,
las tuyas son amarillas,
las mías de tos colores.
Tú vienes vendiendo flores,
tú vienes vendiendo flores,
las tuyas son amarillas,
las mías de tos colores.
No solloces, silencio,
silencio que no nos sientan.
Se cayeron las estatuas
al abrirse la gran puerta.
No solloces, silencio,
silencio que no nos sientan.
Se cayeron las estatuas
al abrirse la gran puerta.
No solloces, silencio,
silencio que no nos sientan.
Se cayeron las estatuas
al abrirse la gran puerta.
'Omega', de Enrique Morente y Lagartija Nick.
El disco más rupturista del cantaor, publicado en 1996 y reeditado en 2008.
La aurora de Nueva York
La
aurora de Nueva York tiene
cuatro columnas de cieno,
la aurora de Nueva York tiene
cuatro columnas de cieno,
y un huracán de negras palomas
que chapotean las aguas podridas.
La aurora de Nueva York tiene
cuatro columnas de cieno.
La aurora llega y nadie la recibe en su boca
porque no hay mañana ni esperanza posible.
A veces las monedas en enjambres furiosos
taladran y devoran abandonados niños.
La aurora de Nueva York gime
por las inmensas escaleras,
la aurora de Nueva York gime
por las inmensas escaleras,
buscando entre las aristas
nardos de angustia dibujada.
Los primeros que salen comprenden en sus huesos
que no habrá paraíso ni amores deshojados,
saben que van al cieno de números y leyes,
a los juegos sin arte, a sudores sin fruto.
La aurora de Nueva York gime
por las inmensas escaleras,
la aurora de Nueva York gime
por las inmensas escaleras,
buscando entre las aristas
nardos de angustia dibujada.
La luz es sepultada por cadenas y ruidos
en impúdico reto de ciencia sin raíces.
Por los barrios hay gentes que vacilan insomnes
como recién salidas de un naufragio de sangre.
La aurora de Nueva York tiene
cuatro columnas de cieno,
la aurora de Nueva York gime
por las inmensas escaleras,
la aurora de Nueva York tiene
cuatro columnas de cieno,
la aurora de Nueva York gime
por las inmensas escaleras,
tiene cuatro columnas de cieno,
la aurora de Nueva York gime,
cuatro columnas de cieno,
la aurora de Nueva York gime
por las inmensas escaleras.
cuatro columnas de cieno,
la aurora de Nueva York tiene
cuatro columnas de cieno,
y un huracán de negras palomas
que chapotean las aguas podridas.
La aurora de Nueva York tiene
cuatro columnas de cieno.
La aurora llega y nadie la recibe en su boca
porque no hay mañana ni esperanza posible.
A veces las monedas en enjambres furiosos
taladran y devoran abandonados niños.
La aurora de Nueva York gime
por las inmensas escaleras,
la aurora de Nueva York gime
por las inmensas escaleras,
buscando entre las aristas
nardos de angustia dibujada.
Los primeros que salen comprenden en sus huesos
que no habrá paraíso ni amores deshojados,
saben que van al cieno de números y leyes,
a los juegos sin arte, a sudores sin fruto.
La aurora de Nueva York gime
por las inmensas escaleras,
la aurora de Nueva York gime
por las inmensas escaleras,
buscando entre las aristas
nardos de angustia dibujada.
La luz es sepultada por cadenas y ruidos
en impúdico reto de ciencia sin raíces.
Por los barrios hay gentes que vacilan insomnes
como recién salidas de un naufragio de sangre.
La aurora de Nueva York tiene
cuatro columnas de cieno,
la aurora de Nueva York gime
por las inmensas escaleras,
la aurora de Nueva York tiene
cuatro columnas de cieno,
la aurora de Nueva York gime
por las inmensas escaleras,
tiene cuatro columnas de cieno,
la aurora de Nueva York gime,
cuatro columnas de cieno,
la aurora de Nueva York gime
por las inmensas escaleras.
No hay comentarios:
Publicar un comentario